Rapé Cumaru

El Rapé Huni Kuin Cumaru es una expresión de la rica herencia de la tribu Huni Kuin de la selva amazónica. Proveniente de la región de Acre en Brasil,  

El rapé Huni Kuin  Cumaru se prepara cenizas del árbol Cumaru, conocido por los Huni Kuin como: “El árbol que no se pudre porque es muy verdadero”, y de el se obtienen cenizas de la más alta calidad. Cumaru es una de las maderas más duras del bosque, incluso es llamado “Cumaru Ferro” por su gran resistencia y peso.

El rapé Cumaru es una excelente medicina para la concentración, el enfoque y la limpieza y protección espiritual, fortaleciendo la mente como la propia madera de Cumaru, la madera de hierro.

El ingrediente principal Mapacho, se combina con ceniza de Cumaru, un tesoro con un profundo significado como símbolo cultural y fuente de conexión espiritual, muy arraigada en las prácticas tradicionales de los Huni Kuin. Para los Huni Kuin, Cumaru es un vínculo espiritual con los espíritus de la selva y un recordatorio de la interconexión sagrada entre la naturaleza y la vida humana. Se usa en ceremonias y rituales, y es un símbolo de la comunicación con los habitantes y los elementos espirituales de la selva.

El árbol Cumaru, (Dipteryx odorata), es apreciado por su madera resistente y duradera, muy utilizada para la construcción de viviendas y herramientas, pero su relevancia antropológica se acentúa por las semillas contenidas en sus vainas. Las semillas, también llamadas «frijoles tonka», son excepcionales por su aroma distintivo y propiedades aromáticas únicas.

-Tamaño: Frascos de 10 ml (8 a 9 gramos)

-Uso: Curiosidad etnobotánica.

26,00

Tribu Huni Kuin: Guardianes de la Selva y Custodios de la Sabiduría ancestral.

 

La tribu Huni Kuin, también conocida como Kaxinawá, se extiende a lo largo de las regiones de Brasil y Perú, y su identidad cultural está intrínsecamente entrelazada con las plantas maestras y la naturaleza que los rodea.

La cosmovisión de los Huni Kuin se caracteriza por una profunda conexión con la naturaleza, donde cada elemento, desde los árboles centenarios hasta las plantas más pequeñas, se percibe como un ser vivo con su propia esencia espiritual.

Para la tribu, la selva amazónica no es solo un entorno; es un hogar sagrado que nutre y sostiene sus vidas. La relación con la naturaleza no es solo práctica, sino también espiritual, y se expresa a través de rituales, ceremonias y prácticas cotidianas.

Los Huni Kuin son considerados guardianes del conocimiento botánico ancestral. Han desarrollado una comprensión profunda de las propiedades medicinales, espirituales y prácticas de las plantas que habitan su entorno. Este conocimiento se transmite de generación en generación, consolidando la posición de la tribu como custodios de la sabiduría natural. Para ellos, las plantas no solo son recursos, sino aliadas espirituales que guían la vida cotidiana y sus ceremonias sagradas.